Tres años han pasado desde el devastador derrame de petróleo en las playas de Ventanilla, y la restauración de la zona aún no se ha completado. Sin embargo, el alcalde Jhovinson Vásquez parece no tomar en serio la situación. A pesar de los carteles que advierten sobre los riesgos de la playa, ha promovido eventos en el balneario Costa Azul, invitando a las personas a entrar al mar, lo que pone en peligro su salud y seguridad.
La situación es alarmante, ya que el mar sigue contaminado, y la exposición puede causar graves daños en la piel y la salud de quienes se atreven a entrar. Además, la presencia de «barcos fantasmas» en malas condiciones aumenta los riesgos, ya que muchos se sienten atraídos por la curiosidad y entran en ellos, exponiéndose a posibles accidentes fatales.
Las vecinas de Ventanilla han expresado su preocupación por la falta de acciones efectivas del alcalde para proteger a la población. Una vecina comentó: “Esperamos que el alcalde haga algo para evitar que las personas entren porque es peligroso. Puede pasar cualquier cosa, incluso enfermedades». Otra vecina recalcó: “Es inaceptable que el alcalde Jhovinson Vásquez no tome medidas para proteger la salud y seguridad de los habitantes de Ventanilla”. La comunidad exige que se restauren las playas de forma adecuada y que se evite que más personas se expongan a estos peligros.
La situación sigue siendo grave, y la comunidad pide que el alcalde tome en serio este problema y trabaje en soluciones efectivas para restaurar la playa, proteger a la población y evitar que más personas sufran daños o enfermedades. La salud de los habitantes de Ventanilla debe ser una prioridad, y se requiere una respuesta inmediata de las autoridades locales
